Una prostituta ciega entabla una relación especial con una clienta a la que conoce bien por su tacto. Una chica con cara de culo vive recluida en su casa por su horrible aspecto. Una mujer deformada tiene problemas con su novio y, también, con su amante, que tiene el cuerpo destrozado. Un joven desea a toda costa no tener piernas y trae a su madre por el camino de la amargura. Sus historias están enlazadas con las de otros tantos personajes que giran a su alrededor.
No se dejen engañar por el aspecto a priori desagradable y sórdido de "Pieles", la ópera prima del famoso actor Eduardo Casanova en el largometraje tras las cámaras. Es una película hermosa, luminosa, muy bella en su fondo: véanla. Es original, muy original. Y perturbadora, sí, mucho, y muy transgresora en muchos de sus pasajes. Pero también es un retrato social certero y brutal sobre las apariencias y la cultura de la imagen que no deja de dar vueltas y vueltas a los tópicos mil veces vistos y que tenemos asimilados sobre los físicos "deseables" en la sociedad y cómo, siendo algo que no hemos elegido, que viene con nosotros al nacer, nos condiciona irremisiblemente y para siempre. Un grupo de personajes deformes, horribles en su apariencia, viven una serie de desventuras que les llevan a encontrarse a sí mismos, a reinventarse, a superar sus problemas, a hallar el amor y el cariño donde menos lo esperan. "Pieles" es una película inteligente, arriesgada, que es consciente de que repugnará a muchas personas pero que no se echa un paso atrás. Desde su espectacular prólogo (inolvidable y que pone los pelos de punta) hasta su genial desenlace, el debut de Eduardo Casanova no deja de sorprender y sorprender sin cesar. Los actores y las actrices están todos magistrales, y llegan al corazón.
Y la estética del filme es una maravilla: sus combinaciones de colores pastel, sus repeticiones de objetos, sus planos esquematizados como cuadros, su ambiente enrarecido de casa de muñecas con sus personajes declaradamente feístas le dan una personalidad única e intransferible. Tiene momentos y diálogos para los anales, que nos hacen reflexionar sobre asuntos que ya conocemos pero desde posturas totalmente nuevas (los del padre y la hija con "cara de culo" y los de la chica deformada y su novio son absolutamente magistrales). "Pieles" es una de las revelaciones del cine español del pasado año sin ninguna duda. Augura una muy prometedora carrera a Casanova.
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