Porco Rosso
sábado, 8 de agosto de 2015
TED II de Seth MacFarlane - 2015 - ("Ted II")
Hace un año que Ted y Tamy-Lynn se casaron y las cosas no les van especialmente bien: la rutina se los come, tienen broncas todos los días y están pasando por su primera gran crisis como pareja. Para intentar salvar la situación, deciden adoptar un niño... Es entonces cuando Ted descubre que el Estado no le considera una persona, sino "una propiedad". Junto a su amigo del alma John, que está pasando también por una crisis tras su divorcio, Ted va a luchar para hacerse con sus derechos y ser visto por la sociedad como un ciudadano más.
No soy nada fan de la primera "Ted", y en esta misma etiqueta tienen la muy dura crítica que realicé de ella cuando se estrenó en el verano de 2012, hace tres años. Ensencialmente, no me gustó nada porque tenía un mensaje final que considero conservador y portador del peor espíritu del "Sueño Americano". Fue algo que me extrañó, especialmente viniendo de alguien como es Seth MacFarlane, que ha sido bastante políticamente incorrecto muchas veces tanto con sus creaciones como con sus declaraciones. Creo que el creador de "Padre de familia" no ha salido bien parado en su salto al cine. Su humor freakie y gamberro se ha quedado en eso: en frekie y gamberro, y nada más. "Mil maneras de morder el polvo", su siguiente película, tenía cierta gracia, pero ni de lejos la brutalidad crítica de la mencionada "Padre de familia" (en sus primeras temporadas por lo menos era así esta serie; después es cierto que tal vez se haya vuelto demasiado gratuitamente absurda). "Ted II" se redime del mensaje del primer "Ted", por lo menos, aunque tampoco contiene un humor ni nada especialmente recordable. Ahora tenemos un alegato a favor de la diferencia y a la vez de la igualdad: Ted es visto legalmente por el Estado como "una propiedad", como un objeto, y quiere legalizar su situación y ser visto y reconocido por la sociedad como un ser independiente y pensante y no como un simple osito de peluche.
Teniendo en cuenta que Seth MacFarlane es gay y que es además un gran y reconocido activista por los derechos de los gays y de otros colectivos como los bisexuales o los transexuales, este mensaje es lógico y es un soplo de aire fresco que redime a una antecesora totalmente increíble en lo que a su contenido como he dicho conservador se refiere. El resto de la película muestra lo mismo que mostraba esta antecesora: el humor es el mismo y los golpes de efecto son los mismos. Ahora yo por lo menos la he disfrutado más esta secuela por no tener que haberme comido con patatas dicho mensaje rancio del "American Way of Life".
"Ted II" es lo esperable. Tenemos mucho humor bruto y canalla, mucha zafiedad delirante, y muchos homenajes freakies a series, películas y cómics míticos. Mila Kunis se va de la saga y es sustituída por Amanda Seyfried, que da vida a un personaje que cae mucho mejor por ser más abierto, menos conservador (y se le hace además un ataque al personaje de Kunis, como si MacFarlane hubiese deseado redimirse de aquella exaltación del "Sentar la cabeza" inexplicable que le poseyó en la primera parte). El resto de personajes repiten, y con gracia. El osito Ted está básicamente en forma y tiene carisma. La trama es predecible y uno se la sabe de memoria nada más empezar la película, pero tampoco da gato por liebre. Viniendo del creador de "Padre de familia", se le podría pedir mucho más a "Ted II", pero bueno... Entretiene como la película comercial veraniega que es, aunque sea rápidamente olvidable.
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