Porco Rosso
miércoles, 9 de diciembre de 2015
MR. HOLMES de Bill Condon - 2015 - ("Mr. Holmes")
1947. Watson ha fundado su propio hogar y Sherlock Holmes ha cumplido 93 años y se ha retirado a una tranquila granja de Sussex, en donde vive con su ama de llaves y su hijo pequeño. El viejo detective, sin embargo, no ha dejado ni piensa dejar de trabajar, y aprovecha la paz y el sosiego del lugar para revisar su último caso, que cree que Watson no redactó ajustándose correctamente a la realidad. Por desgracia, Holmes se va a enfrentar al peor enemigo al que nunca se ha enfrentado: su senilidad. Poco a poco, está perdiendo memoria y capacidad deductiva, y esto le atormenta y le va a hacer pasar por una crisis vital terrible.
Bill Condon es un caso curioso de irregularidad. Lo mismo dirige una maravilla como "Dioses y monstruos" que una bazofia como "Candyman II", lo mismo hace películas más que dignas como "Dreamgirls" que se pone a rodar dos entregas de la saga de "Crepúsculo". En fin, alegrías y tristezas constantes. Este año, por suerte, le ha tocado darnos una alegría. Su última película, "Mr. Holmes", me ha parecido una joyita. Tenemos una nueva versión de Sherlock Holmes que ahora nos lo presenta en sus últimos días, con más de noventa años y siendo plenamente consciente de que le queda poco tiempo y de que su prodigiosa memoria y su enorme capacidad deductiva están cada vez más de capa caída. Un Ian McKellen absolutamente soberbio, inmenso, inolvidable, da vida a este Sherlock Holmes en el que es uno de sus mejores papeles. Y Bill Condon rueda una película crepuscular maravillosa, un filme perfectamente equilibrado entre el toque de thriller y misterio (sigue siendo una película de Sherlock Holmes, desde luego), entre el humor fino y entre el puro drama. Numerosos asuntos son tratados con lucidez: la vejez, el paso del tiempo, la muerte y su llegada, las relaciones entre generaciones distintas, la relación entre la verdad y la mentira y el mito y la leyenda (impagables las escenas en las que Holmes ve películas basadas en sus aventuras que tergiversan su vida para hacerla más atractiva al público) o las consecuencias de la guerra, aquí ejemplificadas en la recién terminada Segunda Guerra Mundial y las catástrofes de Hiroshima y Nagasaki. La fotografía es una delicia, los escenarios son preciosos (los naturales sobre todo: son una maravilla) y las referencias a la obra de Arthur Conan Doyle son siempre respetuosas y mantienen el espíritu original pero añadiendo modificaciones y novedades frescas pero nunca traicioneras.
Como he dicho, Ian McKellen está absolutamente inolvidable como Mr, Holmes. Su interpretación es emotiva, muy seria, coherente en todo momento con su personaje y cargada de respeto. Se sitúa perfectamente, y con él al espectador, entre los dos mundos que retrata, el del pasado y el del presente, separados por la revolución industrial, que tantas cosas buenas y malas ha traído a la humanidad. El ritmo de la trama es sosegado, pero siempre mantiene el interés y emula perfectamente al ritmo de los relatos del detective más famoso de su tiempo. "Mr. Holmes" es la mejor película que ha dirigido Bill Condon desde la también magistral "Dioses y monstruos" y una de las mejores cositas que se han estrenado este año. Extremadamente recomendable e imprescindible del todo para los fans del investigador de Baker Street.
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