Porco Rosso
jueves, 11 de septiembre de 2014
TRUE DETECTIVE de Nic Pizzolatto - 2014 - ("True Detective")
Rust Cohle y Martin Hart fueron compañeros detectives hace mucho tiempo. Ambos siguen viviendo en Louisiana pero sus vidas se han separado por diversas razones e incluso ya no trabajan como investigadores. Sin embargo, son repentinamente requeridos por compañeros de la policía estatal: quieren hacerles unas preguntas sobre un caso que llevaron en 1995... Un caso de terribles y macabros asesinatos que creían cerrado. Rust y Martin va a revivir el pasado... Y van a enfrentarse a sus propios miedos y al retorno a sus vidas del misterio más espeluznante que han tenido nunca que tratar.
Nic Pizzolatto es un guionista y un escritor norteamericano de Nueva Orleans que, hasta este momento, ha trabajado en la serie "The Killing" y ha creado la también serie y exitosísima "True Detective".
Que desde hace unos diez años el mercado de las series está felizmente saturado de grandes creaciones (algunas, por desgracia, se quedan inconclusas debido a esta saturación y a la competencia feroz entre ellas) es un hecho claro. Clarísimo. Y viva este hecho. "True Detective", creada por el escritor Nic Pizzolatto y dirigida por Cary Fukunaga, ha sido una de las grandes revelaciones de este año sin ninguna duda. Con sólo ocho capítulos (se ha anunciado sin embargo una segunda temporada presumiblemente para el próximo 2015), se ha metido en el bolsillo y en el corazón a las audiencias de todo el mundo. Y no es para menos. La calidad de este thriller es gigantesca en todos los aspectos. En el argumental, en el visual y en el actoral. Y todo junto crea una de las mejores historias filmadas de toda la historia (valga la redundancia). En el terreno argumental tenemos una trama detectivesca sórdida, violenta, brutal, realista sin concesiones, que también, como toda buena trama negra, disecciona con un fino y agudo bisturí la sociedad de su momento: concretamente, volvemos a tener aquí a la socorrida e inhóspita y a la vez apasionante Norteamérica profunda de las últimas décadas. "True Detective" es mucho más que una historia de detectives: es una historia sobre la vocación, sobre la búsqueda de la verdad a toda costa, sobre la integridad más escrupulosa (y mal pagada en todos los sentidos) y sobre la lucha del bien contra el mal, de la luz contra la oscuridad. Alrededor de esta trama principal pivotan además otros asuntos como la amistad, la camaradería, la familia, los desencuentros generacionales, la corrupción, la religión, el fanatismo, la violencia, las frustraciones vitales, el machismo, la muerte, el paso del tiempo y también la pobreza que se ha creado con la actual crisis económica global.
Todo está animado con unos diálogos magistrales, maravillosos, de una lucidez cortante, inteligentes. Una delicia en todos los aspectos. Y también por unos personajes espléndidamente construidos sobre los que se cimientan todos los conflictos anteriormente citados. La ambientación, como he dicho, es igualmente magistral: esa también mencionada Norteamérica profunda (en este caso las planicies costeras de Vermilion Parish, en Louisiana) es un personaje más, un símbolo de las luchas de los propios protagonistas y del ambiente estancado, corrupto y podrido en el que se mueven; decrépita y oscura y a la vez fascinante, llena de secretos y de lugares imposibles, esta Vermilion Parish posee una ambientación que pone los pelos de punta y que, como he dicho, es una metáfora, y nada casual, de todo lo que acontece en la trama de "True Detective".
Sin embargo, nada habría sido esta excelente serie sin las absolutamente soberbias actuaciones de su pareja protagónica principal: Matthew McConaughey y Woody Harrelson. El primero demuestra la gigantesca capacidad actoral que siempre tuvo tras años y años de estar anclado en papeles poco o nada interesantes (muchas comedias románticas chorras y muchas películas de acción tontunas; todas películas olvidables y olvidadas) y entrega al mejor personaje; un detective visionario, casi mesiánico, que ya se ha ganado un lugar en el podio de los grandes personajes televisivos de la historia. El segundo se puede lucir menos en su papel, pero igualmente borda al hombre víctima del propio machismo "testosterónico" de la sociedad en la que le ha tocado vivir y consigue momentos espléndidos y brillantes igualmente. Sin McConaughey y Harrelson, sin su química espectacular, sin su carisma que se come la pantalla y la hace explotar, "True Detective" no habría sido tampoco lo que es: una obra maestra indiscutible.
Para el año que viene, como he comentado, hay planificada una segunda temporada de la serie que narrará otra historia independiente sobre detectives en otro escenario norteamericano diferente. Esperemos que cumpla y que, por lo menos, no haga bajar el listón. "True Detective", si sigue en su estela, puede convertirse en una de las sagas del pequeño formato más míticas de la historia. Si no han visto esta primera temporada, están tardando ;)
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La tengo que ver!!! Tiene que estar genial y es de lo más novedoso y aclamado de la parrilla televisiva!!!
ResponderEliminarUn saludooOo enorme!!
Una serie espectacular. Con dos actores que han llegado a rozar la perfección con sus interpretaciones. La cabecera del comienzo de capítulo es simplemente genial.
ResponderEliminarEspero que la segunda temporada se la curren tanto como la primera.
Un saludo!
Gran serie. Una serie sencillamente perfecta, compleja y completa.
ResponderEliminarMiedo me da la segunda temporada con todos los rumores y contratiempos que está protagonizando. Por suerte son historias independientes cerradas, y la primera entrega nos queda como obra maestra.
¡Saludos!
Para ser perfecta le falta un final que no les quede atropellado. No está bien rematada, a mi parecer.
EliminarQue conste que me gusto muchísimo, salvo el final.
Un saludo.