La joven Elissa se muda con su madre, divorciada, a un pequeño pueblo donde ambas quieren empezar una nueva vida. En la casa que hay al lado de la suya tuvo lugar hace años un terrible asesinato múltiple, pero en el lugar han pasado página y han archivado los acontecimientos. Elissa hace nuevos amigos y lleva una existencia normal... Hasta que empieza a frecuentar la compañía de Ryan, un chico que parece tener algo que ver con lo que ocurrió en su casa vecina...
Mark Tonderai ha dirigido hasta este momento dos películas: la road movie de terror "Pánico" y la comentada "House at the End of the Street".
Según he leído, la distribuidora de "House at the End of the Street" ha estrenado la película con un mínimo soporte publicitario y, además, la ha mantenido alejada de los críticos para que pase lo más inadvertida posible y sea olvidada lo más pronto posible. Y todo ello a pesar de que la cinta de marras está protagonizada por Jennifer Lawrence, que está en estos momentos en la cresta de la ola gracias a ser la protagnista de la saga que ha iniciado "Los juegos del hambre" (a la que le quedan dos entregas más por adaptar) y también por haber tomado parte en la exitosa y excelente "X-Men. Primera generación". Y no es para menos; es la pura verdad. "House at he End of the Street" es una de las infamias cinematográficas más horrorosas que he visto este año. Y cómo no, es del género del terror, y cómo no, es un thriller juvenil y, cómo no, está cuajada de tópicos y lugares comunes de su género y es terriblemente predecible gracias a esto. Pocas películas me han hecho pasar últimamente por tantos "Deja Vus".
La Lawrence es una joven que va al instituto y que se muda con su madre a un nuevo pueblo de la Norteamérica profunda (no me suena de nada este argumento) y al lado de su nueva casa hay otra casa en donde hubo una masacre (tampoco me suena de nada) y se lía con su vecino, que es un tanto rarito y misterioso (esto tampoco me suena... vaya, que original es todo) y ya llegan los sustitos, las carreritas y los asesinatos cutres. La película es sosa, muy sosa: los mencionados sustitos son eso mismo, sustitos, y nada originales y completamente esperables y, además, tardan mucho en llegar, demasiado para tratarse de una película de terror (y por cierto, pierde el ritmo sin parar). El desarrollo de los personajes intenta ser algo serio, pero el director no consigue despertar interés por ellos porque son también muy predecibles y porque los actores que los encarnan mucho carisma (por lo menos en esta película) no tienen. Por último, la trama trata de construir un retrato psicológico más o menos justificado y una intriga seria pero se pierde en lo obvio y en el refrito barato de cosas que hemos visto en otras películas: hay aquí un toque de lo que puede ser una suerte de "cine de zombies", hay otro toque de rollo "Psicosis", hay otro toque estilo "Scream" (el habitual) y hay otro toque de cuento de Stephen King, con jóvenes perdidos y con lados oscuros ocultos pero que como he señalado no tienen interés ninguno. Y el final de la película es absolutamente patético y consigue que crezca todavía más la sensación de "Deja Vu" que transmite todo el conjunto de esta cosa llamada "House at the End of The Street". No la vean, por favor, no comentan mi error.
Confieso que esta película ni la conocia, pero después de leerte he decidido que no la quiero conocer. Ea, ea, nene, ya pasó ;)
ResponderEliminarPor cierto, sé que es un peñazo leer actualizaciones sobre peliculas que no has visto, pero te recomiendo Argo y The Imposter. Son de lo mejor que he visto en el Zinemaldi y no creo que tarden mucho en estrenarlas.
Kiss anticastañil ***