DAREDEVIL de Mark Steven Johnson - 2003 - ("Daredevil")

El abogado ciego Matt Murdock es uno de los grandes defensores de los oprimidos de la ciudad de Nueva York: de día lleva un bufete especializado en ayudar a los más pobres y por la noche es Daredevil, un superhéroe enmascarado que lucha contra los malvados desde las sombras. Matt perdió su vista a causa de un residuo radioactivo que, sin embargo, le agudizó de sobremanera sus otros sentidos. Ahora, va a tener que enfrentarse a dos terribles amos del crimen: al señor de la corrupción conocido como The Kingpin y al despiadado asesino Bullseye, que traman oscuros planes. Sin embargo, Daredevil no va a estar solo: una mujer tan especial y poderosa como él va a estar a su lado... Elektra.

Mark Steven Johnson es un pésimo director autor de la mediocre película familiar "El inolvidable Simon Birch", de las bazofias de superhéroes "Daredevil" y "El Motorista Fantasma" y de la horripilante comedia "En la boda de mi hermana".

Aunque los superhéroes, por suerte, cada vez están siendo tratados con más seriedad en sus adaptaciones cinematográficas, la mayoría de ellos todavía no ha gozado de la gran película que prácticamente todos se merecen. Superman, Batman, Spiderman, los X-Men, Hulk, Ironman o Los Vengadores como grupo han tenido sagas o entregas de sus aventuras muy dignas y algunas de ellas son auténticas obras maestras y ejemplos en su género (los dos primeros "Superman" de Donner y Lester, los "Batman" de Tim Burton y Christopher Nolan, "X-Men. Primera generación"...) pero, por desgracia, personajes como el Capitán América, Thor, Los Cuatro Fantásticos, Linterna Verde, The Punisher, El Motorista Fantasma, Lobezno en solitario o Daredevil y Elektra no han tenido tanta suerte (algunos no han tenido ninguna) y se han visto retratados en filmes infames (la mayoría de los mencionados) o en cintas mediocres o simplemente distraídas que no están, de ninguna manera, al nivel que merecen (las películas del Capitán América, Thor o Lobezno no son horrorosas, pero no pasan del "ni fu ni fa"). Daredevil es uno de los desafortunados de la lista: uno de los personajes más interesantes de la casa de Marvel fue tirado vilmente a la basura en esta película de 2003. Daredevil, al igual que Batman, Punisher, El Motorista Fantasma o algunos de los atormentados X-Men, pertenece a esa estirpe de superhéroes más oscuros y violentos que, bien tratados, dan tanto juego. Bien tratados, claro, porque Mark Steven Johnson, el director de esta bazofia (que por cierto también es el de la horrenda primera parte del mencionado "El Motorista Fantasma"), hizo lo que tantos han hecho y siguen haciendo: no tomarse en serio al personaje desde el propio punto de partida y entregar una porquería pueril y cutre.

Ben Affleck, al que tantos tienen manía no sé por qué, no me parece un mal actor, pero no da juego como Daredevil porque parece demasiado cándido en todo momento para interpretar a este personaje, que por cierto en la película es planísimo, y Jennifer Garner tampoco impone presencia como su compañera y amante Elektra: también le falta más dureza y también es planísima. Los dos villanos de la función siguen la línea: son "malos porque sí" (es decir, tan planos como los protagonistas) y, además, no se parecen a los del cómic en el que la película se basa; el Bullseye de Colin Farrell es sosísimo -Farrell también es un buen actor, pero aquí está verdaderamente desganado y horrible, el peor de la función con diferencia- y no tiene ninguna química con el protagonista siendo su enemigo mortal, lo que es imperdonable, mientras que el Kingping del recientemente fallecido Michael Clarke Duncan es el único que se salva un poco de la quema pero no levanta el conjunto porque su personaje sigue siendo muy flojo, como el resto -aparte, Kingping no es negro-. Y bueno, la historia es tan plana como los personajes: hay una introducción de la vida del héroe, hay un romance, hay un toquecito de humor amable, hay una venganza, hay un combate final... Y todo sosísimo, sin ritmo, sustentado en una acción aburrida sin golpes buenos y en unos diálogos penosos, en muchas acrobacias gratuitas pero tópicas y predecibles y en un desarrollo nulo de todos los caracteres. "Daredevil" es un desastre que trajo un spin-off del personaje de Elektra que es todavía peor. Parece que en 2014 va a reiniciarse la franquicia basándose en las aportaciones al personaje que hizo Frank Miller. Esperemos que si se reinicia se le de el trato que se merece.