JUAN DE LOS MUERTOS de Alejandro Brugués - 2011 - ("Juan de los Muertos")

Una horda de zombies hambrientos de carne humana ha invadido La Habana y se está extendiendo por toda Cuba. Dicen los rumores que los responsables son los Estados Unidos, que de una maldita vez quieren someter al país al capitalismo. Juan es un chico de la capital que, ante la falta de oportunidades, conforma un comando cazador de zombies con el lema "Juan de los Muertos. Matamos a sus seres queridos". Comienza el delirio total.

Alejandro Brugués es un director argentino formando cinematográficamente en la Escuela Internacional de Cine de San Antonio de los Baños de Cuba. Ha dirigido hasta ahora dos largometrajes: el drama "Efectos personales" y la comedia de zombies "Juan de los Muertos". Ha colaborado también en la colección "The ABC's of Death" y en la serie de "Abierto hasta el amanecer".

"Juan de los Muertos" me parece una de las películas de zombies más originales de esta década, aunque a la postre resulte, ciertamente, algo fallida. La premisa es una invasión zombie, de las que tenemos ya todos los días en la ficción en miles de formas diferentes, en Cuba, en la de 2011, con Fidel Castro todavía vivo y haciendo de las suyas en su monarquía hereditaria eterna. Juan, el protagonista, se convierte entonces en una especie de Cazazombies a sueldo con el lema de "Juan de los Muertos, matamos a sus seres queridos". Para colmo, corren los rumores de que la epidemia la han desatado los Estados Unidos para someter de una maldita vez al país al capitalismo. Delirante y original a priori, ¿verdad? Pues bueno, el objetivo lo cumple a medias. La primera media hora de la película es maravillosa. Sangre y brutalidad a raudales, homenaje a clásicos de todo tipo y a videojuegos, humor negro y canalla por un tubo y escenas que son, sencillamente, descacharrantes. Juan y sus amigos, interpretados todos con muchísima gracia, son personajes además muy carismáticos y queribles desde el primer momento en el que aparecen. Y los efectos especiales y las escenas de acción están muy, pero que muy bien. El filme, por desgracia, va cayendo poco a poco en una repetición bastante pesada de escenas y, luego, de repente, vira al drama en una curva un tanto cerrada. Se agradece la crítica de Alejandro Brugués a la situación política y social en Cuba, aplastada desde hace décadas por una dictadura que nunca termina (y que a pesar de la muerte de Fidel parece que va a seguir sin terminar) y por un bloqueo internacional que, unido a la opresión castrista, ahoga a sus habitantes y les condena a vivir en un limbo sin futuro de ninguna clase donde la "revolución" ha sido una mentira de las gordas.

Se agradece esta visión en "Juan de los Muertos", visión que imagino que no habrá gustado demasiado a las autoridades del régimen de los Castro en el estreno del filme, y más cuando la cinta ha sido rodada por un director extranjero al que han acogido como estudiante de cine desde dentro del propio país. Sin embargo, al filme esto tan arriesgado no le sienta bien. Pierde sus alicientes de delirante serie B y pierde su humor, que, como crítica social, tal vez funcionase igualmente mucho mejor que este drama repentino. A pesar de todo, la película es original, se ha convertido en un filme de culto y en general funciona. Daba para más, eso sí, y es una pena que se quede a las puertas de algo bastante mejor.