Porco Rosso
jueves, 20 de febrero de 2014
BIG FISH de Tim Burton - 2003 - ("Big Fish")
Will Bloom, periodista norteamericano que vive en París, regresa a su casa de toda la vida en Alabama para estar con su padre, que está muy enfermo, en sus últimos días. La relación que ambos han mantenido nunca ha sido todo lo fluida y cercana que debería haber sido: Will no cree en las historias fantásticas que su progenitor siempre ha contado y que piensa que son falsas y, además, le ve como a un hombre lejano y con el que no tiene mucho en común. Sin embargo, Will va por primera vez a investigar lo que fue la vida de su padre... Y va a hacer grandes descubrimientos. Tal vez no sea demasiado tarde para que los dos puedan entenderse.
Después del fiasco de su fallido remake de "El planeta de los simios", Tim Burton volvió a entregar una de sus mejores películas antes de entrar de forma definitiva en un ciclo de irregularidad en el que todavía está y en el que ha alternado buenas obras con otras mediocres e incluso con sonadísimos bodrios (como esa cosa incoherente y tonta llamada "Sombras tenebrosas"). "Big Fish" tomaba los elementos de los mejores cuentos de hadas del director (como "Eduardo Manostijeras" o "Pesadilla antes de Navidad") para relatar la historia sencillísima pero tremendamente emotiva de un hijo que, ante la próxima muerte de su padre, un hombre con el que nunca se ha sentido especialmente identificado y al que no cree demasiado, se enfrenta al dilema de reorganizar lo que ha sido para él la mencionada figura paterna. El propio Tim Burton había sufrido la dura muerte de su propio padre en el año 2000 y la película, que fue rechazada por Steven Spielberg por encontrarse trabajando en otros proyectos, significaba para él algo especial. Con un reparto excelente encabezado por unos absolutamente brillantes Albert Finney e Ewan McGregor, "Big Fish" retrata una preciosa historia de confianza familiar y de reconciliación paterno-filial que se ambienta en un maravilloso mundo de realismo mágico poblado de personajes verdaderamente entrañables y divertidos.
Asuntos universales como el amor, la amistad, el paso de la juventud a la madurez y de la madurez a la vejez, la muerte y el enfrentamiento contra ella, los sueños y su relación con la realidad, el viaje iniciático o la fraternidad complementan la trama principal, llevada con un gran ritmo por Burton, que salta entre "cuento y cuento" con agilidad y que, por supuesto, vuelve a crear un universo propio que bebe de los grandes mitos de la cultura norteamericana y también de su historia e idiosincracia para homenajearlos y también parodiarlos (en esta ocasión, desde el más sentido cariño). Sobra decir que el aspecto técnico y visual de "Big Fish" es una joya y un prodigio más de imaginación e inventiva. Este filme es un cuento lleno de encanto y otro de los mejores del director gótivo de Hollywood.
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Sin duda alguna es una de mis películas favoritas. Y es que todo lo que salga del imaginario de Tim Burton, es siempre de una fantasía irremediable!!!
ResponderEliminar- Y ésta junto con "Eduardo Manostijeras" es su filmografía favorita.
Además me encanta el maravilloso y adorable trabajo que hace Ewan McGregor. Una delicia!!!
Un saludoOo enorme!!