Porco Rosso

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viernes, 17 de enero de 2014

LA BATALLA POR EL PLANETA DE LOS SIMIOS de J. Lee Thompson - 1973 - ("Battle for the Planet of the apes")


Los humanos y los simios han alcanzado una frágil paz: aunque todavía los primeros son considerados ciudadanos de segunda clase, César los protege y busca la forma de que, en un futuro, las dos especies puedan convivir en igualdad y fraternidad. Todo se tuerce por desgracia porque Aldo, el jefe de los gorilas, busca un enfrentamiento con los hombres y porque entre las ruinas de la civilización se ha desarrollado una raza de mutantes que también es tremendamente hostil... El destino del planeta está en las manos de César y de sus amigos humanos y simios.


El capítulo final de la saga "clásica" de "El Planeta de los simios" fue "La batalla por el Planeta de los simios", que de nuevo dirigió con bastante peor fortuna que en el anterior filme J. Lee Thompson. La que es la peor entrega de la serie junto a la también infumable "Huida del Planeta de los simios" es la más cutre de todas técnicamente hablando (en la tercera por lo menos sólo había tres simios y se ambientaba en "nuestros días"): se quiere representar un mundo post-apocalíptico con medios muy reducidos y termina todo teniendo un aura de serie B bastante cutre. La historia que el filme narra tampoco acompaña: la trama, que ahora contiene aventuras y que incluso incluye una batallita, aunque insiste de nuevo de forma acertada en el mensaje antibelicista y ecologista, destaca por sus diálogos malos, por su extrema simpleza expositiva, por sus improvisaciones (¿Cómo aprendieron a hablar los simios en tan poco tiempo?) e incluso por sus incoherencias (no queda claro si estamos ante una suerte de "tiempo alternativo" al que conoció Taylor -especialmente porque los humanos ahora pueden hablar- o ante el preludio de lo que se narraba en la primera "El Planeta de los simios" -aunque lo que a mi me da es que estamos ante un mal guión a secas, hecho de cualquier manera y al que no le importa no coincidir con las otras entregas de la saga, y punto-).


Los actores cumplen simplemente, pero ya incluso a Roddy McDowall, que vuelve a repetir como César instalándose como el único intérprete que ha aparecido en todas las entregas de la franquicia clásica, se le ve aburrido de tanto encasillamiento (y eso que el hombre repetiría como simio una vez más en la serie de televisión que se rodó al año siguiente). Por si fuera poco todo esto, el aspecto técnico, como he dicho, es terrible: el poblado de los simios parece un campamento de casitas de árbol hecho por unos niños (es cutre, cutre, cutre), la ciudad destrozada por la supuesta catástrofe nuclear es un decorado bastante penco y poco realista (el de "Regreso al Planeta de los simios" ya era poco realista, pero al lado de éste es una maravilla), el maquillaje ha perdido una calidad notable y esa batalla final entre cuatro motos y cuatro coches semidestrozados con explosiones "de petardazos" (y hay alguna que se repite incluso en el montaje...) es absolutamente lamentable.


"La batalla por el Planeta de los simios" se cerró con un final feliz (aunque levemente abierto a posibles continuaciones por si hubiese sido "necesario" rodarlas) y, como a pesar de lo trillada que estaba la franquicia tuvo mucha aceptación en las taquillas, al año siguiente se produjo una serie llamada "El Planeta de los simios" que, a pesar de ser megapublicitada, no gozó de ningún éxito en las televisiones y fue cancelada tras 14 capítulos y menos de cuatro meses en emisión.


1 comentario:

  1. Creo que en esta entrega colaboró el gran maquillador Rick Baker. Recuerdo la serie televisiva y aunque la vi con ilusión (era muy fan de la saga de los simios) me pareció muy mala.
    Saludos. Borgo.

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