Porco Rosso
jueves, 31 de mayo de 2012
AMERICAN BEAUTY de Sam Mendes - 1999 - ("American Beauty")
Lester Burnham, a las puertas de la mediana edad, está absolutamente hastiado de su vida: aunque habita en un barrio residencial y no le falta de nada, su existencia le amarga y le aburre mortalmente. La comunicación y el sexo con su esposa, obsesionada por el éxito social, brillan por su ausencia; no se encuentra nada cercano a su hija, una adolescente acomplejada; su trabajo le disgusta y los días pasan ante él sin nada que le puedan ofrecer. Todo esto, sin embargo, va a empezar a cambiar: Lester va a dar a todo un giro de 180 grados y va a dedicarse, simplemente, a "vivir". Esto, por desgracia, no va a sentar bien a todos los que le rodean...
Hay gente que la adora y gente que la odia, y supongo que es normal. "American Beauty", el debut en la dirección de Sam Mendes y en el guión de Alan Ball ("A dos metros bajo tierra", "True Blood"...), fue un éxito instantáneo y ha sido parodiada e imitada hasta la saciedad y para bien o para mal es una película que ya tiene un lugar de honor en la historia del cine norteamericano. Si bien creo que podría ser un poco más incisiva y cruda en el retrato social que hace (como sí lo es la que muchos han catalogado como su "rival", la genial y más revulsiva "Happiness" de Todd Solondz, producida un año antes), "American Beauty" me parece un ejercico excelente de crítica al Sueño Americano que se deja pocas cosas en el tintero: apunta sobre todo a la sociedad de las apariencias y la hipocresía, pero le tira también a la homofobia, al autoritarismo familiar, a la obsesión por el militarismo, a la alienación de la sociedad de la belleza estereotipada o a las frustraciones y represiones sexuales. Kevin Spacey está absolutamente brillante en el papel de un hombre que es aplastado por la mencionada sociedad de las apariencias: tiene una gran casa en un barrio residencial, todas sus necesidades cubiertas de sobra y una familia (el sueño yanki por excelencia) que, de puertas afuera, parece equilibrada y perfecta. Sin embargo, el sexo con su esposa es inexistente, al igual que la comunicación con ella y con su hija, y se siente, a las puertas de la crisis de la mediana edad, absolutamente hastiado y frustrado con su vida, que ve desaprovechada y alejada de lo que él en su juventud imaginaba que sería. Cuando este personaje cambia, su entorno también lo hace, aunque puede que con fatídicas consecuencias.
En un estilo narrativo simple y conciso (marcado por las impresiones del propio protagonista) y con una visualidad sellada con las metafóricas rosas, que aparecen constantemente como símbolos tanto del triunfo (al parecer, el propio multimillonario John D. Rockefeller identificaba a la rosa "American Beauty" con esto) como de los sueños que todavía pueden ser posibles (surgen en las escenas oníricas), Mendes se mueve de personaje a personaje para mostrar una galería de caracteres muy abierta (la mujer obsesionada por el ascenso social, el homófobo enfermizamente reprimido, el joven que quiere ser libre y vive de espaldas al sistema que tratan de imponerle, la joven superficial y finalmente insegura, la joven que no quiere ser como la anteriomente citada...) que se contraponen al principal de Spacey: unos le siguen en su búsqueda de la honestidad vital y del "carpe diem" que tanto tiempo ha olvidado; otros no pueden salir de sus cárceles sociales y de prejuicios. Estos personajes están todos maravillosamente interpretados; Annette Bening, Thora Birch, Wes Bentley, Mena Suvari o Chris Cooper entregan grandísimos papeles. Irónica, desprejuiciada en su momento, con la dosis justa de tragicomedia y con un desenlace que sigue emocionando, "American Beauty" me sigue pareciendo un drama social en plena forma trece años después de su estreno. Anticipó la carrera de uno de los directores ingleses más sólidos de hoy, Sam Mendes.
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Gran película sobre el reverso tenebroso del sueño americano, todo un decálogo de las grandezas y miserias de las familias de los barrios residenciales. Muy buena.
ResponderEliminarUn saludo
Genial película. Soy incondicional de Kevin Spacey desde aquellos 'Sospechosos habituales' y aquí está impresionante.Todo el peso recae en el y sabe llevarlo perfectamente. También Annette Bening está estupenda.
ResponderEliminarEl guión, la música...todo un clásico.
Me gusta el cine de Mendes. He asistido a una charla que dio y me ha parecido una persona muy interesante y maja.
Saludos.
Creo, y a lo mejor me matan algunos "gafapastosos", tu ya sabes, creo American Beauty tiene más alma que Happines, y eso que me gusta también mucho esta peli. Saludos. Paul.
ResponderEliminarA mi me gustó bastante, y como bien dice El bueno de Cuttlas, es la otra cara de lo bonito que pintan otras películas la vida americana, con el padre enseñándole a jugar a beisbol al hijo, mientras la madre les saca limonada para que se refresquen, la niña saltando a la comba, y el vecino de al lado regando el cesped y saludando amistosamente. También tienen su lado tenebroso.
ResponderEliminarsaludos.
Le da mil vueltas a Hapiness y punto. Solamente matizar que no me parece una crítica específicamente al Sueño Americano, sino al sueño de todo curreta aspirante a clase media. (Te podría citar unas docenas de casos que no son precisamente americanos) La ambición, el ascenso social, las apariencias y la hipocresía son la base de este progreso mal entendido para muchas y muchas sociedades, y bajo las mas diversas formas. Aquí vemos algunas muy americanas pero tampoco hay que mirar tan lejos.
ResponderEliminarTe has olvidado del perro Charly, en toda familia norteamericana guay de tiene que haber un chucho con el que los chavales puedan jugar en el jardín.
ResponderEliminarQue Dios bendiga a América y tal
Maravillosa, ¿qué más decir?
ResponderEliminarMuy buen film, pero no lo pondría por encima de Happines.
ResponderEliminarHola!
ResponderEliminarBuena crítica. American Beauty me parece una película que quiere llegar a ser y no pasa de ser. Es verdad que hay escenas que pasarán y han pasado a la historia del cine, pero como película no tiene fuerza suficiente: sobretodo en guión.
Felicitaciones por el blog. Cuando quieras estas invitado a pasarte por el mio: http://cafeycigarrilloscine.blogspot.com.es/2012/06/programa-6-extranos-en-el-paraiso.html
Un saludo!
Diego