Porco Rosso
lunes, 21 de noviembre de 2011
SNATCH. CERDOS Y DIAMANTES de Guy Ritchie – 2000 – (“Snatch”)
El ladrón Franky tiene que entregarle un valiosísimo diamante al mafioso Avi, su jefe. Sin embargo, se le ocurre la mala idea de apostar en un combate ilegal de boxeo antes de cumplir su encargo… Muy pronto, y para su desgracia, su preciado diamante está corriendo de mano en mano por toda la ciudad. Todos lo quieren, y todos van a luchar con todas sus armas por conseguirlo. El caos y la destrucción están a punto de adueñarse de todo.
A pesar de que su anterior cinta “Lock and Stock and Two Smoking Barrels” cosechase un gran éxito tanto de público como de crítica, fue “Snatch” la película que terminó de hacer famoso internacionalmente a Guy Ritchie, una nueva comedia negra que repetía la fórmula de la anterior pero que, a pesar de no ser ya algo original, divertía, y mucho. Un grupo de personajes extravagantes de toda clase y condición ven sus caminos cruzados por un malévolo azar y han de sobrevivir a circunstancias extremas aliándose, engañándose, traicionándose o asesinándose entre ellos. Tras muchas carreras y muchos disparos dicho azar les hace la jugarreta final y los malentendidos precipitan la más delirante de las catarsis. El resto es lo que vimos en el anterior filme: una trama hábilmente retorcida y desordenada y vuelta a ordenar cimientada en un estilo efectista y muy videoclipero y en un cortante montaje, un ritmo frenético, unos diálogos ágiles y efectivos desternillantes y una colección de escenas violentísimas y por momentos incluso sádicas y hasta surrealistas vistas desde el humor negro más desprejuiciado y canalla. Su guión está magistralmente ensamblado y está lleno de inventiva, sobre todo en el aspecto de las situaciones en las que sumerge a sus personajes. Aunque tal vez sea una película algo sobrevalorada (especialmente gracias a la moda tarantinesca que todavía sigue causando furor –y lo que nos queda-), no se puede decir que “Snatch” no sea divertida: lo es, y como he dicho antes, muchísimo. Las actuaciones de su acertadísimo reparto, en total estado de gracia, también ayudan: son todas geniales, especialmente la de un Brad Pitt soberbio que derrocha carisma a raudales. Una pequeña joyita de la comedia negra. Para ver con muchos amigos en una tarde de cervezas y risas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Oeoeoeoeoe, por fin te puedo firmar. Y resulta que lo consigo en una película que no he visto. ¡Sensacional!
ResponderEliminarPero bueno, a lo que vamos ¿SOSPECHA DE BARRYMORE?
Ays! que no la he visto... Mafia y boxeo... no me atrae demasiado.
ResponderEliminarUn saludo.
Impresionante y descacharrante film, de momento la cumbre del cine "Ritchieano" (perdón por el término).
ResponderEliminarAy si hubiese seguido esta estela el señor Ritchie...
ResponderEliminarConcuerdo con muchos en decir que la película es buena.Cerdos y Diamantes tiene una buena historia y grandes actuaciones.
ResponderEliminar