Porco Rosso
martes, 22 de noviembre de 2011
MATADOR de Pedro Almodóvar - 1986 - ("Matador")
Por culpa de una fatal cogida, Diego tuvo que abandonar su pasión, el toreo, para dedicarse a la enseñanza de esta disciplina que ya nunca podrá volver a practicar. Nunca olvidó su amada profesión, y por eso ha asesinado a varias jóvenes… Y piensa seguir haciéndolo. María es abogada, pero también asesina: mata a sus amantes mientras hace el amor con ellos. Cuando los caminos de ambos se cruzan, se desata la pasión más brutal. Pero la tragedia no puede tardar mucho en llegar a sus vidas…
Con “Matador”, su quinta película, Pedro Almodóvar ya prácticamente se instala dentro de la línea de sus grandes dramas, línea que había comenzado con la que en mi opinión es su primera obra maestra, “¿Qué he hecho yo para merecer esto?”. La diferencia es que aquella era un drama de clara inspiración social (tipo de drama que tristemente el cineasta casi no ha vuelto a tratar desde entonces) y esta es un drama puramente pasional, el “género” que ha hecho más famoso al director manchego fuera de las fronteras españolas. Con su habitual puesta en escena de desprejuiciado y vistosísimo collage visual de marca puramente española, presenta en “Matador” Almodóvar la historia de dos seres tan brutales como tiernos que viven obsesionados con el sexo y su relación con la vida y la muerte. Uno es torero retirado (el fallecido Nacho Martínez) y la otra es abogada (Assumpa Serna). Alrededor de sus crímenes se urde un thriller que, homenajeando a los grandes clásicos aunque mezclándolos con el humor irreverente almodovariano, lleva al espectador por una imparable oleada de excesos de toda clase en la que el sexo y la muerte se funden en una unidad de placer y de dolor. Nunca han parado de decirlo, pero creo que es bastante cierto y acertado: “Matador” bebe muchísimo de la idea de “El imperio de los sentidos” del gran Nagisa Oshima. Los dos amantes se autodestruyen en una trágica orgía de amor, posesión y violencia.
Almodóvar, sin embargo, no se limita en su filme a tratar esta tormentosa relación, sino que añade (y creo que por culpa de estas añadiduras el filme resulta parcialmente fallido) toda una trama de suspense en torno a sus dos protagonistas que incluye otros hechos y personajes que se quedan sin desarrollar tan bien como los principales. Es un error que Pedro ha cometido en más de una ocasión, error que ha lastrado algunas de sus cintas. En “Matador” la historia de amor principal se diluye en el mencionado thriller que deja colgados a personajes como el secundario interpretado por Antonio Banderas, cuya función no termina de quedar del todo clara, y que se pierde en hechos truculentos “extra” que terminan por cargar en demasía el conjunto. Por supuesto que Almodóvar siempre ha sido truculento de una forma u otra (incluso cuando lo es para desarrollar sus escenas de humor), pero en su quinta obra esta truculencia llega a ser tanta y tan desaforada que se mezcla ambiguamente con la comedia tornándola negra de una manera tan delirante que llega al punto de hacer que el drama que narra pierda fuelle. La trama, por otra parte, esta tan gratuitamente enrevesada que en momentos puntuales se deja ver claramente artificial y más preocupada en sorprender a toda costa que en desgranar las aventuras de su pareja principal. Y es una lástima, porque “Matador” apunta bien alto en sus inicios y sólo se queda sumergida en un cóctel explosivo e imaginativo de pasión y fetichismo (fetichismo que la enlaza con la ya más depurada “Átame”) pero al que le falta definición y consistencia.
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Esta es una de las pelis almodovarianas que no he visto. Tú sabes que el famosérrimo director manchego no es my cup of tea aunque me gusten mucho Mujeres al borde de un ataque de nervios o Volver, por ejemplo. Sus historias llegan a ser demasiado déjà vu para mi gusto (dijo Pessoa que lo que cada uno de nosotros tenemos que contar es breve y que no se debían escribir 20 libros distintos a menos que se pudiera escribir como 20 escritores distintos. Creo que esto es aplicable al cine too).
ResponderEliminarAdemás, supongo que el tema toreril siempre me ha echado un poco para atrás (aunque me gusta la idea de la sublimación de sangre toril con asesinatos humanos. Los toreros asesinan y no hay mas que hablar).
Si someday la veo, volveré ;)
Kisses críticos ***
P.S. Se que lately estoy muy pesada con las recomendaciones, pero Medianeras ver debes. Tomorrow crítica sin spoileres colgar, OK? ;)