MEDIANERAS de Gustavo Taretto - 2011 - ("Medianeras")

Mariana trabaja como decoradora de escaparates en un centro comercial y Martín diseña páginas web. Ambos viven en la misma manzana de Buenos Aires, aunque en diferentes edificios. Se cruzan a menudo por la calle, pero no se conocen. Ambos se sienten solos y buscan el amor... Sus vidas tal vez estén a punto de unirse inesperadamente...

"Medianeras" fue el primer largometraje del argentino Gustavo Taretto (el año pasado presentó el segundo, "Las insoladas"), y es sin ninguna duda una de las mejores películas del cine de Argentina de su año. Es una historia de amor, pero también es una disertación sobre la sociedad moderna, la que ha surgido en las grandes ciudades a partir del "boom" de Internet y de la supuesta "era de la comunicación". Unos excelentes Pilar López de Ayala y Javier Drolas (la primera se ha preparado magnificamente su papel, porque no es argentina, sino española, y clava el acento) son dos almas perdidas en Buenos Aires, una mole de cemento y cristal en "un país desierto", como el propio filme dice. Son casi vecinos: viven en la misma manzana. Sin embargo, no se conocen. Los dos han tenido experiencias tristes tanto en lo amoroso como en lo laboral (la mención a la crisis de la Argentina del tristemente célebre "corralito" está presente) y los dos viven en apartamentos pequeños de dos grandes edificios deshumanizados. Ni Internet, ni el hecho de estar comunicados con casi cualquier parte del mundo instantáneamente, ni el de tener toda la información que quieran a mano, les llena. "Medianeras" habla del amor, pero es sólo el marco: el asunto principal del filme es la soledad. Alrededor, Gustavo Taretto trata otros asuntos relacionados: la mencionada internet, la sobrecarga de información, la deshumanización de las ciudades, el hecho de no conocer ya ni siquiera a los vecinos o las trabas que la propia arquitectura pone para las relaciones interpersonales.

Buenos Aires, cómo no, es un protagonista más del filme: una de las urbes más inmensas de toda Sudamérica y del planeta envuelve a dos personajes perdidos y a los que tal vez sólo el amor, la expresión total del "encuentro con el otro", puede redimirles. El estilo es pausado, cargado de lirismo cotidiano, delicado y con unos diálogos lúcidos. El drama se da la mano con un toque de humor y prevalece un mensaje de buenos sentimientos y cargado de optimismo final y esperanza. "Medianeras" es una de las "comedias románticas" (obsérvense las comillas) más bonitas y serias (porque el género no siempre lo es; de hecho es uno de los más devaluados que existen hoy) que he visto últimamente. No se la pierdan.