viernes, 15 de mayo de 2015
VENGADORES: LA ERA DE ULTRÓN de Joss Whedon - 2015 - ("The Avengers: The Age of Ultron")
Tras haber superado con éxito una peligrosa misión en el país en guerra de Sokovia, Los Vengadores disfrutan de una merecida fiesta. Algo, sin embargo, turba su paz: un proyecto de Tony Stark y Bruce Banner ha tomado conciencia de su existencia y de su poder y, también, de los fallos de la humanidad... Este proyecto se llama Ultrón, y tiene sus propios planes con respecto al planeta Tierra. Los Vengadores se van a enfrentar a un enemigo terrible... Y sin embargo van a tener por suerte nuevos aliados con nuevos poderes.
Decepciona "Los Vengadores: La Era de Ultrón". Decepciona por el gran nivel de su antecesora y decepciona porque termina al nivel de una gran parte de las películas "de superhéroe en solitario" del Universo Cinematográfico de Marvel: un nivel aceptable, de entretenimiento solvente, pero nada más. En la primera "Los Vengadores" Joss Whedon clavó la aventura perfecta: la dosis justa de esta mencionada aventura, de drama, de comedia y de mensaje (y el mensaje no era ñoño ni moralista barato). Esta segunda película es como he dicho entretenida, pero nada más, y además tiene algunas escenas en las que se cuela el rollazo de siempre de la persecución cansina del Sueño Americano. Por otra parte, los nuevos personajes no terminan de ser redondos: ni los protagonistas que llegan al grupo ni el villano de turno. Empecemos por ellos: los Vengadores que como he dicho se unen al grupo en esta secuela no tienen un carisma especialmente destacado. Mercurio y la Bruja Escarlata (en realidad hijos del mutante Magneto, villano por antonomasia de los X-Men -aquí por un problema de derechos no se dice nada de ello y por ahora no creo que se diga-) no llenan la pantalla con sus acciones: su drama es solvente y tiene sentido, pero no emociona, y se unen demasiado deprisa al bando de los "buenos" dejando sus motivaciones iniciales de lado de una manera un tanto cutre y precipitada.
Por otra parte, Visión está mal desarrollado: es verdaderamente difícil que un profano en de los cómics de Marvel se entere bien de por qué surge este personaje y a cuento de qué viene su carácter. Por ello, es realmente olvidable, por muy bien que lo interprete Paul Bettany. Finalmente, Ultrón tampoco cumple: es un villano que daba para mucho, pero que termina siendo bastante "de opereta". Sus motivaciones están cortadas a tajos: no especifica su plan de "regeneración", y no es creíble que quiera aplicarlo porque su desarrollo anterior es apenas un apunte que no nos da razones suficientes de sus actuaciones. Y amigos, cuando el villano de una historia de superhéroes falla, mal asunto: el villano aquí es tan importante y a veces más que el protagonista o los protagonistas.
El filme, además de estos fallos, tiene algunas escenas como he dicho que glorifican el rollazo de siempre del Sueñecito Americano: la de la granja se lleva la palma. Resulta que Ojo de Halcón vive ahora en plena naturaleza con una familia perfecta y esto les produce melancolía a los otros Vengadores. Es un ejemplo el chaval porque sigue el camino del mencionado Sueño Americano. Pues vaya. Esto, en 2015, creo que está ya muy superado, y me decepciona que salga en una película de Los Vengadores, por muy ultrapatriotas y muy Marvel que sean todos. Y después queda el diálogo de la Viuda Negra con Hulk en el que por ser estéril se compara con él diciendo que ella también es un monstruo. Apología de la natalidad y del tener hijos como el fin de toda existencia a tutiplén. Decepcionante por partida doble.
Las escenas de acción de "Los Vengadores: La Era de Ultrón" no están mal. Cumplen de sobra, en espectacularidad e inventiva (y el combate de Ironman y Hulk es especialmente bueno, pienso) y, sin embargo, no emocionan como las de la primera parte (y, además, hay un protagonismo del personaje de Tony Stark preponderante de forma descarada en todas ellas que ya llega a molestar -leches, que tienes más de diez personajes para explotar en Los Vengadores, no abuses de lo mismo, por muy enrollado y molón que sea Robert Downey Jt.-). El humor se torna además repetitivo y el drama está cogido con pinzas en algunas partes de una trama algo errática y poco equilibrada (no convencen las reacciones de Mercurio y Hulk, la historia de amor entre éste y la Viuda Negra, el poco protagonismo del Capitán América, de Thor o de Nick Furia...). Es una pena, pero la segunda parte de "Los Vengadores" es entretenida y ya. ¿Suficiente? A estas alturas no.
de acuerdo 100% con tu visión de esta peli entretenida, muy, pero totalmente inofensiva, olvidable... solo decir que para mí Robert es demasiado actor acá, así que su protagonismo en todo caso se agradece... salu2!
ResponderEliminarVaya por delante que no la he visto aún, pero ello no quita que mantenga mis suspicacias a cada avance "franquicio" de la Marvel, la DC, o quien sea. Primero tengo que verla, pero es muy posible que tengas razón en cada punto que reseñas...
ResponderEliminar... Ahora bien. tengamos en cuenta lo cerrado y plegado que es el puñetero "universo Marvel". Como bien dices, hay que ser un buen conocedor de este tipo de obra para que no te rechinen según que opciones del guion o licencias para cada personaje. Es así. Visión, por ejemplo, es un personaje fascinante, demasiado ambiguo y complejo para minimizarlo en una cinta de mamporros; más o menos es el equivalente al Detective Marciano de la DC, y no me extraña que pinte desubicado, porque sólo hay que imaginar qué puede llegar a sentir el que probablemente sea el superhéroe más poderoso de The Avengers, pero que tenga que reprimir constantemente ese poder sólo porque está con los buenos... Alan Moore lo describió mucho mejor cuando creó al Dr. Manhattan. Un tipo más allá de toda moral y sin apego a la humanidad, pero al que se pone constantemente a prueba, precisamente por ese conservadurismo que tú señalas y que, para qué engañarnos, es seña identitaria de los comics de superhéroes, pero desde siempre...
En fin, que tendré que verla. De todas formas, Ultrón siempre me pareció un moñas... A mí el que me ponía era... ¡Galactus!... Ése si es un crack...
Un saludo...