lunes, 30 de marzo de 2015

ROBIN HOOD de Ridley Scott - 2010 - ("Robin Hood")


Robin Longstride, un gran guerrero y maestro arquero, vuelve a Inglaterra, su patria, después de haber luchado en las estériles Cruzadas, un conflicto injusto y sangriento en el que ha matado a montones de personas en el nombre de su rey, Ricardo Corazón de León, un carnicero brutal y patán. Cuando este monarca muere en una batalla contra los franceses, que planean invadir Inglaterra, Robin, junto a otros hombres hartos como él, decide luchar por su cuenta por la justicia y contra las conspiraciones de Francia y las que laten en su propio país. Comienza la leyenda de Robin Hood...


Después de dos maravillosas obras maestras como son "American Gangster" y "Red de mentiras", a Ridley Scott le toca de nuevo un viajecito por la irregularidad. Es la marca de la casa, por desgracia (e incomprensiblemente). Tras estas dos mencionadas joyas, entregó su versión de "Robin Hood", que voy a comentar hoy; "Prometheus", que ya comenté en su día en este blog y que para mi fue un fracaso artístico decepcionante (aunque la película tiene tantos amantes como detractores); otra maravilla como fue "El consejero" y, justo después, una cosa floja e inconsistente como la reciente "Exodus". Ridley Scott es así: impredecible para bien y para mal. Sin embargo, su "Robin Hood" de 2010 para mi puede considerarse una buena película en todos los aspectos. Es cierto que no tiene la espectacularidad épica de otras obras históricas de su autor como "Gladiator", pero desde luego que me parece un filme más que destacado y muy interesante. La historia de Robin Hood bucea en los inicios (sí, está de moda desde el "Batman Begins" de Christopher Nolan) del héroe y delinea su retorno a Inglaterra tras el fracaso de su carrera como supuesto héroe, valga la redundancia, en Las Cruzadas, y sus primeras aventuras antes de alcanzar la fama. Rusell Crowe, correcto y más que solvente en todos los aspectos, da vida a este Robin Hood, y le acompaña un plantel de secundarios igualmente solventes entre los que destaca una buena Cate Blanchet y un villano excelente al que da vida Mark Strong. La trama, bastante extendida en más de dos horas, no se hace lenta y no deja de interesar, y el aspecto visual, viniendo de quien viene, es más que notable.


Este "Robin Hood" de Ridley Scott retrata una acertada Edad Media sobria, sucia, seca, sin demasiada épica salvo la justa y necesaria. Se aleja en este sentido de, por ejemplo, la Roma esplendorosa de la mencionada "Gladiator". Se acerca más a obras como "Robin y Marian" de Richard Lester (salvando las distancias, claro) que a los "Robin Hood" clásicos y heroicos a los que estamos más acostumbrados en las pantallas. El drama está bien llevado, los diálogos cumplen, los personajes tienen un buen desarrollo y la trama no se pierde en aventureo barato ni tampoco en dramatismo estéril. No es la mejor película de Ridley Scott, pero desde luego que es una buena película.


2 comentarios:

  1. A mi me pareció un coñazo. Una película muy justa que podría haber sido mucho más sin necesidad de "épica".

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  2. Un ladrillo de proporciones épicas y es que posterior a Gladiator, cuando Ridley toca lo épico aburre hasta las cabras (Exodus, El reino de los cielos...). El reparto, lo mejor. Un saludo!

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