Porco Rosso

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lunes, 2 de julio de 2012

MEN IN BLACK de Barry Sonnenfeld - 1997 - ("Men in Black")



El agente de policía James Edwards, un hombre normal y corriente de Nueva York, descubre casi por casualidad una terrible conspiración... Intergaláctica. Una fuerza del mal alienígena pretende acabar con La Tierra. Absolutamente asombrado por su hallazgo, James pasa a ser además reclutado por los Hombres de Negro, un grupo especial que se dedica a regular la vida terrestre y a mediar entre sus habitantes y los extraterrestres que viven en ella. James se va a convertir en el agente J y, junto a su socio, el misterioso y serio agente K, va a luchar contra la amenaza que pende sobre el planeta.


El estadounidense Barry Sonnenfeld es un director especializado en el cine familiar convencional (sobre todo cómico) sin personalidad y habitualmente mediocre pero que, de vez en cuando, ha regalado alguna cinta digna y divertida. Habitual creador de éxitos de taquilla aunque con algún que otro fracaso sonoro por ahí, su filmografía se compone de la comedia fantástica "La familia Addams", de la nueva comedia "Conserje a su medida", de la secuela "La familia Addams. La tradición continua", de la de nuevo comedia "Cómo conquistar Hollywood", de las comedias de aventuras y ciencia ficción "Men in Black" y "Wild Wild West", de la secuela de la primera "Men in Black II", de otras dos comedias llamadas "El gran lío" y "¡Vaya vacaciones!" y de la tercera parte de su saga estrella "Men in Black III".


"Men in Black", basada en un cómic de Lowell Cunningham, sin ser una película maravillosa, es una comedia divertidísima y con mucha gracia que parodia todo aquel rollo de las "teorías de la conspiración" que en los años noventa tan de moda estaba gracias a series míticas como "Expediente X" y a otros y diversos productos y subproductos. Dicen que el cómic en el que la cinta se basa es bastante oscuro, violento y cínico, y los que lo han podido leer han criticado mucho a Sonnenfeld por alejarse de él para presentar el típico producto de entretenimiento palomitero-veraniego-navideño. No he podido leer dicho cómic, así que voy centrarme únicamente en la película, que, desde mi punto de vista, podía haber estado más aprovechada (haber sido más retorcida, más pulpera, más gore incluso -material había- y haber tenido más mala leche en su parodia), pero tampoco puedo decir que no me haya reído con, por lo menos, esta primera parte de esta saga que este año se ha convertido en trilogía. Sí, casi todo "Men in Black" se reduce a otra historia típica de "poli joven cachondo y poli maduro serio que han de colaborar a su pesar y que se terminan cogiendo cariño" que tantas veces hemos visto ya, pero lo cierto es que tanto Will Smith como Tommy Lee Jones tienen un carisma apabullante y resultan lo suficientemente graciosos para salvar el conjunto, que por otra parte en lo puramente artesanal está bastante conseguido, lo cual, unido a su total falta de pretensiones, consigue un resultado destacado dentro de lo que se puede esperar.


La ambientación de la película funciona a la perfección (esa agencia oculta con alienígenas enrollados y humanos cazadores de rollo funcionarial colaborando para salvar el universo tiene su gracia), los efectos especiales son verdaderamente buenos para su momento (la cucaracha alien es magnífica y muy imaginativa), las escenas de acción tienen la espectacularidad esperable y son divertidas, la trama es predecible pero logra interesar desde el primer al último momento y los secundarios de la cinta, entre los que destaca una excelente Linda Fiorentino dando vida a una suerte de Dana Scully looser (lástima que esta actriz no repitiese en las otras dos entregas y que esté hoy tan olvidada), un gran Vincent D'Onofrio como el villano de la función y un también bueno Rip Torn como el jefazo de turno. "Men in Black" es distraída, es cachonda y funciona, y bueno, como cine de entretenimiento es en todo momento un buen producto (además de ser la mejor película de Barry Sonnenfeld, algo que no es nada difícil por otra parte). Otra cosa bien distinta son ya sus secuelas, una verdaderamente despreciable y otra que salva algo el conjunto aunque no enseñe ya nada nuevo.


3 comentarios:

  1. Ya la primera parte de lo que ya puede llamarse la saga MIB me gustó poco, así que nunca seguí adelante con el resto de películas.

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  2. No es nada del otro mundo, pero la vi en el cine en su día y la verdad es que me lo pasé pipa como el niño que era y le tengo su cariñito jejeje. Eso sí, las otras dos puffff. Bueno la tercera es que ni la he visto ni la pienso ver después de la mierdaza de la segunda. Paul.

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  3. Félix S. Trabanco2 de julio de 2012, 11:58

    En 1997 con 18 años me gustó, hoy la considero una verdadera tonteria. Algunos chistes acertados y poco (o nada) más. No ví sus secuelas por causas obvias. Olvidable.

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