Cuatro amigos se marchan a Las Vegas de despedida de soltero. Se preparan para vivir juntos unos días de juerga salvaje y de excesos y ligues por doquier. Pero algo ocurre en la ciudad de las apuestas. Algo que va a transformar su viaje en una pesadilla.
Mal asunto a priori "Hostel III. De vuelta al horror". Cierre de saga sin Eli Roth en cabeza, con un cutre como Scott Spiegel en la dirección (autor de bazofias como "Abierto hasta el Amanecer II") y estrenada en los Estados Unidos directamente en el mercado del DVD. Muy, muy mal asunto a priori. Y a posteriori: "Hostel III" es un capítulo extra sacado de la manga para dejar la franquicia en trilogía de forma forzada que es todavía más lamentable que su segunda entrega, que ya es decir. Roth se quita de en medio, como he comentado, y el director de serie B penca de marras entrega eso mismo: una película de serie B penca que parece además sacada por su estética de la década pasada. Si en "Hostel II" se había notado una ampliación del presupuesto, aquí se nota todo lo contrario. Los escenarios se vuelven cutrísimos, los actores son todavía más patéticos, los efectos especiales son muy malos (y estamos ya en 2011: incluso en una producción de corte televisivo se puede apañar ya algo medianamente digno) y por consiguiente la violencia y la sangre se reducen considerablemente (lo cual es curioso al ser esto una saga "exploitation"). La trama es la misma por tercera vez, pero ahora los diálogos han empeorado todavía más (si es que alguna vez fueron buenos), los personajes dan maldita la pena (todos horrorosos) y las conexiones con sus dos antecesoras son mínimas (por decir algo) y ahora dejamos la polémica Eslovaquia que se inventó Eli Roth y nos vamos, por la puta cara, a Las Vegas. Sin explicaciones, porque sí. Los personajes de la segunda parte y todo lo que pasó en ella al carajo: da igual, si total, al público fan de estas porquerías le importa todo un pito. Eso es hilvanar bien una saga. "Hostel III. De vuelta al horror" es una mierda asquerosa y chusca. Recomendada para muy, muy, muy, muy completistas de sagas. Para el resto no vale ni como comedia gore.
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