Porco Rosso
sábado, 27 de mayo de 2017
PIRATAS DEL CARIBE: LA VENGANZA DE SALAZAR de Joachim Ronning y Espen Sandberg - 2017 - ("Pirates of the Caribbean: Dead Men Tell No Tales")
Jack Sparrow, a punto de ser ajusticiado por su larga vida de piratería, se cruza con el joven hijo de Will Turner, Henry Turner. Éste le propone un trato: le ayudará a escapar si le él a su vez le ayuda a encontrar el legendario Tridente de Poseidón, un objeto mágico que le permitirá salvar a su padre de la maldición del Holandés Errante. Sparrow no tiene muchas opciones... Y además, un viejo enemigo, el capitán Salazar, está buscándolo para ajustar cuentas... Y para colmo este hombre está maldito y es una amenaza para todo el mundo de los piratas.
La segunda, tercera y cuarta entrega de "Piratas del Caribe" fueron tan malas (o en el mejor de los casos tan anodinas y olvidables) que esta quinta, "Piratas del Caribe: La venganza de Salazar", sabe hasta bien. No es nada del otro mundo y reincide en los errores habituales de las mencionadas secuelas de la saga (sobre todo un guión farragoso y un metraje alargado innecesariamente), pero ante los despropósitos de aquellas (especialmente de la segunda y de la tercera, que eran absolutamente infames), no molesta al visionado y tiene momentos que hasta divierten. Los noruegos Joachim Ronning y Espen Sandberg son ahora los encargados de la dirección, y lo cierto es que hacen un trabajo más que aceptable, como han venido haciendo en sus anteriores películas en general. El malo de turno ahora es un cazador de piratas español maldito de corte zombie (otra vez muertos vivientes) interpretado por un Javier Bardem que, como siempre, tiene sobrado carisma. Repite Johnny Depp y repite Geoffrey Rush, ambos en sus papeles de siempre con una química aceptable y cachonda, y también vuelven personajes clásicos de la saga para hacer una pirueta que enlace a todas las películas con una cierta coherencia. Los nuevos protagonistas son aceptables, aunque el del hijo de Will Turner está algo desaprovechado por no decir bastante (mucho mejor el carácter de Kaya Scodelario, mucho más interesante). Y luego tenemos a los secundarios comparsa que hacen gracietas de siempre (esencialmente, la tripulación inútil de Jack Sparrow). No vuelve Penélope Cruz a la saga aunque su marido esté ahora en ella, pero tampoco se echa de menos a su personaje, a pesar de que habría sido interesante ver cómo acababa su relación con el mencionado Sparrow. Y bueno, luego tenemos lo de siempre: aventuras frenéticas, escenas de acción delirantes cuando no imposibles, mucho humor, muchas localizaciones exóticas, mucha fantasía con monstruos incluidos, efectos especiales por un tubo y homenajes a las anteriores entregas y al cine de aventuras clásico.
El filme adolece de, una vez más, durar demasiado. Le sobran diez minutos o hasta más perfectamente, y el alargamiento del metraje es como he dicho absurdo porque no aporta absolutamente nada. También el guión tiene bastantes agujeros y errores (planes cogidos con pinzas, malos inútiles, teletransportaciones, incoherencias con respecto a las anteriores películas, algún secundario que desaparece por la cara) y también algunas escenas de relleno que no vienen a cuento y que entorpecen la trama principal. Sin embargo, entretiene sin dar gato por liebre, lo cual ya es decir mucho en esta devaluada saga, y hay además momentos de humor bastante adulto y canalla (como el de la madre de cierto personaje, que me hizo carcajearme verdaderamente) que sorprenden de sobremanera. "Piratas del Caribe: La venganza de Salazar" es lo mejorcito de la franquicia desde aquella "Piratas del Caribe: La maldición de la Perla Negra" de 2003 que resucitó al género de los bucaneros con su total falta de pretensiones y su cachondo buen hacer. Aceptable. Pero eso ya es algo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario