Gabriel y Elias son dos hermanos daneses. Uno es un profesor universitario triunfador y otro un pajillero sin mucho oficio ni beneficio. Cuando el padre de ambos muere, descubren que no era realmente su padre biológico y que tienen una familia a la que no conocen. Los dos viajan, en busca de sus raíces, a una pequeña isla de su país casi despoblada en la que al parecer viven sus hermanos en un ruinoso caserón. Una locura delirante está a punto de llegar a sus vidas.
Anders Thomas Jensen es un director danés con una filmografía aún corta centrada en el drama y en la comedia. Alterna películas buenas con otras irregulares. Su obra se compone de las comedias negras "Luces parpadeantes" y "Los carniceros verdes", de la comedia "Las manzanas de Adán" y de la tragicomedia "Men and Chicken".
Vi "Men and Chicken" en un festival de cine fantástico hace alrededor de un año y me dejó con una extraña sensación. Es, pienso, una película personal, indiscutiblemente personal. Y, sin embargo, también es fallida por ser demasiado larga e imprecisa. Unos hermanos buscan a el origen de su familia y de sus padres biológicos en una pequeña isla danesa en la que hay un pueblo de mala muerte abandonado en el que viven menos de diez personas. Estas menos de diez personas tienen que ver algo con su pasado. El filme combina unos parajes bellísimos, una fotografía preciosa y un sentido lírico del espacio muy bonito con una serie de personajes y escenas sucios, escatológicos, feístas y hasta violentos. La película tiene una personalidad única, y es este hecho el que no deja de chocar constantemente. Para gustos, colores. Todo se sumerge en una suerte de realismo mágico feo, deforme, pero a la vez apología de la vida sencilla en la naturaleza y de la diferencia. "Men and Chicken" es un cuento optimista, feliz, que cree en el ser humano y en lo bueno que tiene a pesar de todas las cosas malas que hace. Sí, cuesta creerlo con todo el humor negro, zafio y como he dicho hasta escatológico que tiene. Los caracteres del filme desatan a veces la ternura y a veces el asco. Creo que es lo que buscaba Anders Thomas Jensen. Sin embargo, y aquí ya salimos del "para gustos, colores", la película es demasiado larga, pierde el ritmo y, además, presenta una trama errática que no sabe muy bien a dónde va. El humor delirante cansa, la combinación entre este humor y el mensaje serio está muy descuadrada, la trama se estira y se estira sin que pase nada en demasiadas ocasiones y el espectador cae en el sopor. "Men and Chicken" es una cinta personal, nadie dice lo contrario, pero también bastante abrupta y fallida. Una experiencia que a unos gustará y a otros desagradará pero que propone algo nuevo de forma indiscutible. Un filme de altibajos constantes. Y Mads Mikkelsen está impresionante, como siempre: no se me puede olvidar.
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